Carta de Tatiana Spiridónova a Hermógenes Pérez de Arce


..."lo que ocurre en la justicia chilena respecto los uniformados, 
me hace recordar el periodo de las represiones estalinistas"...


Iquique, 7 de agosto del 2011.
Estimado don Hermógenes:

 He leído su extraordinario artículo del 03 de Agosto del presente el cual resonó con dolor en mi corazón. En este país todos los uniformados (militares, carabineros) resultan ser renegados por la sociedad, y como parte de la sociedad son los más odiados y reprimidos. Así es la estrategia y táctica de los comunistas chilenos, los que hacen lo similar a lo que han hecho los comunistas en Unión Soviética.


    
Respecto esto quiero decir que don Miguel Krasnov Martchenko es uno de los militares más destacados de los tiempos contemporáneos, que se distingue con una enorme escala de dones como militar: intelectual, honesto, noble, valeroso; que tiene claros los conceptos del honor y de la dignidad; el erguido firmemente sobre las posiciones de la moral y valor. Un cosaco ruso del Don, por su origen, que tiene ancestros legendarios. Todo esto contribuye a la formación de su imagen brillante, extraordinaria, que tiene una especial distinción en su esfera militar.
Por esto tanto lo odia la mediocre delincuencia política de la izquierda. Para los izquierdistas, la delincuencia común y cotidiana es el “querido hermano menor”. Y la delincuencia política tiene las mismas raíces. Es por esto que ellos quieren y cuidan tanto a los bandidos de todos los “colores políticos”. Por esto ellos nunca van a defender los derechos y las vidas de personas honestas.
Todo lo que ocurre en la justicia chilena respecto los uniformados, me hace recordar el periodo de las represiones estalinistas, cuando a las personas las acusaban por los crímenes inventados, lo que concordaba con una frase muy difundida en aquellos tiempos: “¡Que haya la persona – el cargo se encontrará por si solo!”. 


En relación a todo esto yo propongo:


1) Formar una delegación representativa.
2) Escribir una carta-gestión a nombre del Presidente con firmas y exigencias.
3) Ir al encuentro personal con el Presidente para exigir la liberación de los presos políticos uniformados.

Hay que levantarse a la lucha por los uniformados en serio. Estoy dispuesta de tomar la participación personal en todas estas actividades.
     
     Atentamente,

                                         Tatiana Spiridónova