BRIGADIER MIGUEL KRASSNOFF:
Me llamo Juana Miranda González, soy chilena residente en Uruguay.
En mi último viaje a Chile mi cuñado me obsequió el libro Prisionero por Servir a Chile, en el que la periodista, Gisela Silva Encina, narra su vida. Me tocó sufrir en Chile toda la etapa del gobierno de la Unidad Popular y su libro me hizo revivir los angustiantes momentos que vivimos en esa época, detallados con una gran realidad en dicho libro. Lo he leído con muchísimo interés pues fui recorriendo, paso a paso, los duros momentos pasados y la gran alegría que tuvimos los chilenos cuando las FF.AA. tomaron el poder.
Lo lamentable de todo esto es la gran injusticia que se cometió con muchos oficiales de las FF.AA. y sobre todo en su caso, porque esa honradez, disciplina, coraje, valores morales que recibimos como guías de nuestras vidas, están resumidas en su persona a la que admiro plenamente.
He seguido toda la historia de su preciada familia y me causó mucha tristeza conocer el penoso pero a la vez glorioso camino de sus vidas.
Tuve la suerte de conocer hace muchos años a un ruso blanco, Arcadij Kunavich, que defendió hasta el fin al Zar Nicolás II y desde entonces aprendí a conocer y a admirar a ese pueblo que enfrentó con tanta valentía todos los males que vivieron posteriormente.
Ahora, he tenido el gran placer de conocer su vida, que es un ejemplo a seguir y de la cual debe estar orgullosa no sólo su magnífica familia sino también todos los chilenos que nos sentimos representados por seres tan inmensos como Ud.
Sólo me queda enviarle un fuerte abrazo que atraviese pampas, llanuras y montañas y se una a ese enorme corazón que Ud. tiene.
Gracias Brigadier Miguel Krassnoff, me siento tan orgullosa de Ud. y recuerde siempre que no está solo.
Juana Miranda
Montevideo, Uruguay, 20 julio 2012