La Revolución y el Lavado Cerebral
Y ahí está el problema: en el lavado de cerebros. Por eso el brigadier (r) Miguel Krassnoff es tildado casi universalmente de "asesino", en circunstancias que durante su año y tanto como teniente en la DINA hace casi 40 años no mató ni torturó ni detuvo a nadie (salvo haber llevado en brazos a la conviviente herida de Miguel Enríquez para entregarla a una ambulancia). No obstante, ha sido condenado por "presunciones" y sirve presidio perpetuo de hecho por variados delitos que no cometió.
MIÉRCOLES, 15 DE AGOSTO DE 2012
No crean ustedes que para mí es fácil vivir en Chile porque, al revés de casi todos los demás habitantes de este país, "yo conozco los hechos", para emplear las mismas palabras con que el historiador inglés Paul Johnson justifica la inclusión de Augusto Pinochet entre los "héroes de todos los tiempos", en su libro "Héroes".
Ayer en la tarde estaba en un lento viaje de regreso a casa, que me tomó una hora y cinco minutos, siendo el tiempo normal habitual de 23 minutos (es decir, me acerqué transitoriamente a la situación que vive a diario el santiaguino promedio, gracias a un plan socialista llamado Transantiago), y venía oyendo el espacio de Pilar Molina, que entrevistaba a una dirigente estudiantil declaradamente cercana al MIR, que vaciaba el acostumbrado torrente de palabras destinado a justificar las usurpaciones y destrucciones que llevan a cabo los secundarios para conseguir que se consagre en el país una educación completamente socialista (es decir, la peor de todas). Cuando la entrevistadora hizo referencia a la adhesión que la dirigente había manifestado a la memoria de los hermanos miristas Vergara Toledo, afirmó que éstos "fueron asesinados el 29 de marzo de 1985".
Eso, para mí, fue lo más importante del programa, porque puso de relieve el estado de la nación. Pues no es lo más importante, por lo ultrasabido, que la dirigenta estudiantil adhiera al Movimiento de Izquierda Revolucionaria, un grupo armado antiguo y dedicado a destruir la democracia por las armas; tampoco es lo más importante que en las movilizaciones estudiantiles, como ésta a que ella convoca, se haya comprobado la presencia de al menos siete miembros del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, brazo armado comunista destinado a encabezar la lucha armada (nombres: Jorge Gálvez Iturra, Juan Solís Ulloa --registrado agrediendo a carabineros con un tubo--, Danilo Rojas, Leandro Torchio y Juan Carlos Araya, además de dos mujeres, la primera de las cuales registra 18 detenciones entre 2004 y 2011; y la segunda 13 (información publicada en "El Mercurio" de 13 de julio de 2012, detectada por el abogado experto en DD. HH. Marcelo Elissalde Martel).
No, lo más importante para mí fue otra cosa: que Pilar Molina aludiera a los hermanos Vergara Toledo como "asesinados" bajo el Gobierno Militar. Eso representa la opinión transversal de los chilenos.
Y ahí está el problema: en el lavado de cerebros. Por eso el brigadier (r) Miguel Krassnoff es tildado casi universalmente de "asesino", en circunstancias que durante su año y tanto como teniente en la DINA hace casi 40 años no mató ni torturó ni detuvo a nadie (salvo haber llevado en brazos a la conviviente herida de Miguel Enríquez para entregarla a una ambulancia). No obstante, ha sido condenado por "presunciones" y sirve presidio perpetuo de hecho por variados delitos que no cometió.
Volviendo a los hermanos Vergara Toledo, el hecho fue que el 29 de marzo de 1985 el carabinero Marcelo Muñoz Cifuentes se acercó a ellos, en la Villa Francia, y les pidió identificarse, ante lo cual ellos le dispararon a mansalva, dejándolo herido en el abdomen y en una pierna. Los demás tripulantes del furgón policial donde iba al carabinero Muñoz persiguieron a sus agresores armados y les dieron muerte.
Un tercer hermano, en noviembre de 1988, derribó una torre de alta tensión mediante explosivos, cerca de Temuco, pero él y una mujer que le acompañaba resultaron muertos por la misma explosión que provocaron. Al acudir la policía, comprobó que él llevaba un documento de identidad a nombre de Eduardo Durán, pero las pericias posteriores determinaron que era el tercer hermano Vergara Toledo muerto a raíz de un atentado terrorista.
Pero han pasado a ser "héroes" y cada 29 de marzo ¡se celebra! el "Día del Joven Combatiente", consagrado como efeméride por la Presidenta Bachelet. Desde el punto de vista de ésta, justificadamente, porque fue ayudista del MIR, grupo terrorista al cual pertenecían los hermanos (ver biografía de ella, de los periodistas Andrea Insunza y Javier Ortega).
Por supuesto, "veinte años después" los jueces de izquierda que son mayoría en nuestra judicatura, condenaron a los carabineros que dieron muerte a dos hermanos Vergara Toledo e incluso sometieron a proceso al que, sin mediar provocación y a mansalva, había sido herido por ellos.
En Chile hay actualmente un proceso revolucionario en curso, que se mantiene gracias a la falta de autoridad del gobierno pero, también, al lavado de cerebros que permite celebrar anualmente como efeméride el aniversario de un atentado; que sus protagonistas sean "héroes" para la juventud y que, en cambio, estén cumpliendo condena carabineros que desempeñaron la arriesgada e injustamente olvidada misión de proteger a la civilidad del terrorismo armado.